La señora Ana Luisa Gil es una de las tantas víctimas que en todos movimientos de protesta busca la Policía Nacional para luego responsabilizar a los dirigentes comunitarios de los hechos negativos que resulten de las movilizaciones .
Por órdenes superiores los agentes policiales incentivan el desorden y se escudan en que lanzan bombas lacrimógenas y disparan con el objetivo de contener los disturbios ocasionados por grupos de manifestantes, pero en Tamboril no hubo disturbios durante la huelga de 24 horas que se desarrolló el martes pasado.
La señora falleció en el hospital público del municipio tras ser llevada en estado agónico, asfixiada por los gases de las bombas lanzadas por los agentes del desorden, en un barrio de gente humilde y trabajadora.
Es por eso que los culpables de la muerte de la señora Ana Luisa Gil en Tamboril hay que buscarlo en las filas del gobierno y en su aparato represivo llamado Policía Nacional?