Por Arturo Taveras
Víctor Díaz, presidente de la
seccional del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en New Jersey, se ha
convertido en uno de los políticos más valiosos en las urbes neoyorquinas,
debido a que es un hombre visionario, pulcro, trabajador y defensor de la dominicanidad.
Además de ser un fiel militante del
partido gobernante, Díaz es un dominicano defensor a rajatabla de los intereses
de su pueblo en playas extranjeras, lo que ha demostrado en New Jersey y las demás
ciudades estadounidenses donde ha hecho vida social-
También se ha convertido en un propulsor
y defensor del sector empresarial y de la comunidad criolla en Estados Unidos,
donde contribuye con el gobierno dominicano en la captación de inversiones para
su país con la promoción del clima de confianza que existe en la tierra de
Duarte para los empresarios extranjeros.
Su probada capacidad gerencial, su
solvencia moral, su altiva acción social en beneficio de sus coterráneos y su interés
por el desarrollo de su pueblo, lo hacen merecedor de un lugar cimero en la representación
de la dominicanidad en Estados Unidos.
La honestidad, el altruismo y su sentido
de unidad y hermandad han llevado a Víctor Díaz a deponer sus intereses particulares para que en momentos difíciles primen los valores
que contribuyen a la colectividad, por el bien de la unidad partidaria y
comunitaria de su entorno.
Su vida política se desarrolla, luego
de participar como líder en clubes
culturales y movimientos de lucha social en República Dominicana, donde atraídos por las ideas políticas del más
preclaro organizador de masas, el profesor Juan Bosch, Víctor Díaz decidió ser parte del más importante mecanismo de liberación
de su pueblo, el Partido de la Liberación Dominicana.
Su paso a la política valió la pena
y el tiempo le dio la razón, porque su
decisión fue acertada, ya que el PLD se ha convertido en el único partido
político que ha reivindicado las luchas de un pueblo trabajador y de paz.
Aunque sin un cargo en el gobierno,
Díaz ha hecho grandes aportes a su partido y al país desde la diáspora dominicana
donde se mantiene activo como presidente de la seccional del gobernante partido
en New Jersey.
Además de ser un militante a carta
cabal del PLD, el citado dirigente político es un hombre amigo y fiel al
presidente Danilo Medina, defensor de la transparencia y la unidad de su
partido, por que siempre ha luchado por la permanencia en el poder de esa organización
política.
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