El dramaturgo inglés William Shakespeare dijo que "llorar es hacer
menos profundo el duelo". Pero, en República Dominicana, el postulado del
citado dramaturgo ha recibido un complemento que acompaña la tristeza que causa
la muerte de un ser querido, una simbiosis de música y drogas combinada con lágrimas
y llantos.
No se trata de una celebración por la muerte como ocurre en otras
culturas en las que se entiende que el difunto pasa una mejor vida. Es una manifestación
de identidad con el gusto y la filosofía de la persona muerta.
Pero, aún se conservan los funerales tradicionales en los que abundan
los sollozos, los colores oscuros, el café, incienso, pan y queso, y en los menos conservadores se coloca la música
de acompañamiento, camino al cementerio.
Con relación a la muerte humana, el antropólogo Juan Ignacio Cayola dijo
que "el luto constituye la expresión simbólica del sentimiento de pérdida
experimentado como respuesta universal a la muerte, una expresión social en sí
misma y, por lo tanto, externa y sujeta a una gran variabilidad cultural".
Cada comunidad proporciona las
normas de comportamiento social, entre las cuales se incluyen las conductas
apropiadas para cada momento del duelo.
‘’No es lo mismo morir en oriente que en occidente, en África que, en
Europa, en países industrializados que otros que no lo son", continúa
Cayola.
Empero, barrios y campos del Cibao, donde hace varias décadas atrás los
velatorios eran de llantos y sollozos, en medio de un silencio sepulcral, donde
ni siquiera los vecinos se atreven a encender la radio o hacer algún tipo de
fiesta por respeto al alma del difunto, ahora se
convierten en fiestas, tanto en el velatorio como en el funeral
Mientras en algunos velatorios aún se reza alrededor del ataúd que
contienen los restos de la persona, otros rocían cervezas y ron sobre el cadáver,
cantan y vociferan.
Cuando hay que amanecer velando al muerto, cuando se trata de un
velatorio en la casa, no faltan los chistes, cuentos picantes, historias y
también hay personas que aprovechan el lugar para juntarse con amigos y tratar
temas sociales, culturales, económicos y políticos.
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